top of page

"Que yo no haya sido discriminada hasta ahora no significa que no haya una serie de diferencias sustanciales y notables entre hombres y mujeres" - Lucía Mbomio

Screenshot_20190525-164838_Instagram[1].

La periodista Lucía Mbomío sonriente en la calle.   

/ Fuente: Instagram de Lucía (@luciambomio)

Lucía Mbomio, hija de una segoviana y un ecuatoguineano, es una periodista madrileña que actualmente es reportera del programa Aquí la Tierra de TVE, además de colaborar con Afrofeminas, una comunidad en línea para mujeres de descendencia africana.

Como mujer afrodescendiente, Lucía habla sobre su carrera y su vida, juntamente con las discriminaciones que hay en el mundo del periodismo.

1. ¿Por qué decidiste estudiar periodismo?

¿Desde cuándo quiero ser periodista? Desde que tengo recuerdos más o menos. Con 3 años mi

padre me enseñó a leer y me gustaba mucho escribir, leer, enterarme de cosas… Luego, a parte,

era bastante locuaz. Tenía un primo que jugaba conmigo a temas de periodismo. Estaba haciendo

la carrera de periodismo y hacía las prácticas medio como un juego conmigo. Yo era muy pequeña,

tengo cintas grabadas de cuando tenía cuatro o cinco años. Él me entrevistaba y yo pensaba: “esto

es muy divertido”.

Luego ya con el tiempo, tenía claro que quería ser periodista, pero nunca asociada a la televisión

por la vergüenza, le edad...Lo que sucede, es que el primer trabajo que me ofrecen, como trabajo

y no prácticas que ya las había hecho en radio, fue en una tele. Evidentemente hay ciertas cosas

que no puedes escoger, no hay mucho trabajo en televisión. Por tanto lo probé y descubrí el

lenguaje audiovisual y me quedé porque me pareció muy chulo. No tanto estar delante de cámara como estar detrás. La posibilidad de trasladar imágenes, sonidos, historias, con todos esos elementos me parecía muy chulo.

2. ¿Veías futuro impedimentos como mujer para trabajar en este oficio?

 

Como mujer no veía impedimentos en su momento. Mi conciencia feminista es más tardía que la de raza porque la de raza es la que me ha provocado que no me dejen entrar en locales, cuando me han insultado no me han dicho mujer de mierda, sino negra de mierda. Siempre he pensado menos en ella. Dicho esto, no veía impedimentos para trabajar como mujer porque el groso de personas que salíamos licenciadas éramos mujeres y muchas de ellas empezaron a trabajar. Ahora bien, lo que sí que veía más difícil, y sigo viendo, es lo de trabajar como jefas. Jefa en una redacción aún, pero en una cadena directiva de un periódico es más difícil.

3. ¿Te has sentido discriminada o rechazada por motivo de género?

Hasta ahora no me he sentido rechazada por motivos de género. En los programas en los que he estado siempre he tenido jefas, entonces quizá esto tiene un porqué. Incluso a nivel temático de los reportajes que hacía, siempre, salvo una vez que me dijeron: “mejor que vaya el chico”, he hecho exactamente lo mismo que mis compañeros.

 

Sin embargo, que no lo haya sido hasta ahora no significa que no haya una serie de diferencias sustanciales y notables entre hombres y mujeres. En la televisión, por ejemplo, el físico. Yo no digo que sea una mujer preciosa, que no lo soy, soy normal, pero en el caso de las mujeres sí que tienes que quedar bien en cámara. No hay muchas mujeres, salvo en los canales públicos o en programas que tienen que ver más con el corazón, que superen los kilos que se entienden que son normales, según un cánon. Los chicos da igual, pueden no tener pelo, ser gordos o no, pueden ser lo que se entiende que es ser guapo o no, y eso es así. Con el tema de la edad pasa un poco lo mismo. Las mujeres tenemos fecha de caducidad, los hombres no. Ellos pueden tener los años que sea que no va a repercutir en su carrera laboral. Se entiende que puede tener más experiencia, se puede ver con Matías Prats que tiene ya sus años, que me parece perfecto, y con las presentadoras de informativos. Salvo en las cadenas públicas que es un poco diferente.

4. Si al hecho de ser mujer le añadimos el color de piel distinto al del prototipo europeo blanco, ¿te sientes aún más discriminada?

Claro, esto es algo que tú no sabes porque no te dicen directamente: oye, no puedes trabajar por ser negra. Entonces, nunca lo sabré. Sí sé que me ha ido bastante bien, a mi no me ha faltado trabajo. También sé que hay una lectura muy concreta del hecho de tener mujeres negras en una redacción, que está un poco ligado a modernidad, lo cual es, en cierto modo, instrumentalización. Yo quiero pensar que a mi no me ha afectado, que yo soy una profesional, pero claro, una nunca sabe. Yo quiero pensar que es así.

No me he sentido discriminada por razones de género o de raza porque he trabajado siempre dentro de redacciones. Que yo no me haya sentido discriminada no significa que eso no exista. De hecho, a la vista está. Enciende la televisión y puedes contar con los dedos las personas negras que aparecemos o hemos aparecido. Lo cuantifiqué en su momento y me salieron unas 42 personas, entre hombres y mujeres, en 60 años. Menos de una persona por año. La cifra responde por mí.

5. ¿Has vivido alguna discriminación o acto en contra de usted que la haya marcado en la profesión?

En cuanto a discriminación, una cosa son los compañeros o que te cojan y otra la percepción. Un día estaba en Españoles en el Mundo grabando a una entrevistada, y ésta a su vez me presentó a otra persona. La otra persona, estaba yo grabándole, y le pregunté de dónde era. De repente dice el tío: ¿Y tú? Yo le dije que de Madrid, ya estaba cortando la grabación para preguntarle a la reportera de dónde era, y me dijo: ¿cómo vas a ser tú de Madrid? No tengas verguenza que a mi me gustan mucho las morenas.

Un día a un compañero de trabajo de un tío mío, aparecí yo en televisión y dijo: fíjate si hay mujeres guapas y españolas y tienen que poner a ésta.

Primero asumen que para ser periodista y salir en televisión tienes que ser guapa y no tener una formación. Y segundo, por supuesto, con esta extranjerización perpetua a las mujeres negras, a las personas negras en general, pues asumiendo que yo era de fuera.

Screenshot_20190525-164813_Instagram[1].
Screenshot_20190525-164754_Instagram[1].

Lucía Mbomío junto a una puerta con un pañuelo

/ Fuente: Instagram de Lucía (@luciambomio)

La periodista Lucía Mbomío con un pañuelo en la cabeza

/ Fuente: Instagram de Lucía (@luciambomio)

6. A parte de vivirlo, ¿has visto que se cometiera una discriminación en contra de una compañera tuya?

Hace poco, ví a una chica de origen saharaui que trabaja en la radio de TVE y en La 1, hubo un señor que dijo que le parecía fatal que una tía con acento árabe estuviera en la radio, que que forma de estropear la lengua de Góngora o algo así. La apoyamos muchas personas.

7. Sabemos que estas muy volcada en el tema de la discriminación de las mujeres negras en España, ¿cómo empezó todo esto?

Con el tema del activismo afro llevo un montón de años. Estudié en Portugal y allí ya había un porcentaje muy importante de compis de clase que eran africanos o afrodescendientes, y cuando regresé a España me apeteció empezar a poder tener todas aquellas conversaciones que tenía a solo unos kilómetros, en Portugal. Cuando quise intentarlo me dí cuenta hasta qué punto somos menos personas, es más difícil dar entre nosotras, hay mucho menos construido a nivel comunidad, no solo por nuestra parte sino también a nivel reconocimiento más bien. Por ejemplo, allí en las bibliotecas podías acceder a contenidos de Cabo Verde, Mozambique… Aquí en cambio eso es casi una entelequia. A partir de ahí me di cuenta de que el racismo institucional existía. El hecho de que te digan que te van a dar clases de historia universal y que solo te hablen del norte del mundo, del norte político, no solo norte geográfico, dice muchas cosas y tiene muchas consecuencias. En los últimos tiempos, sí que es verdad que lo que he hecho ha sido construir un discurso que no está relacionado únicamente con el racismo desde un punto de vista general, sino que lo he vinculado a mi profesión y hablo desde el periodismo, desde la raza, de cuál es la representación de las personas africanas y afrodescendientes en esos medios, y también lo hago con perspectiva de género.

#periodismo #reportera #mujer #África #afrodescendiente #discriminación

bottom of page